Viernes, 28 de septiembre: San Wenceslao

Wenceslao, duque de Bohemia, vivió a principios del siglo x. Su padre era cristiano, su madre gentil, pero su abuela Ludmille lo instruye en la fe. Gracias a la enesñanza de Ludmille, crecerá rápidamente en el camino de las virtudes y su castidad y su piedad serán admirables. Elegido como rey por sus compañeros, gobernó el Reino de los checos más por su bondad, se dice el Breviario, que por su autoridad. Continuó sus buenas obras estando ya en el trono, ayudando a los pobres. 
Dice, el oficio del Breviario, que su devoción a los sacerdotes y a la Sta. Misa eran tales que tuvo como un gran honor el confeccionar personalmente, las hostias de trigo y el vino que servirá para el Santo Sacrificio... 
Su hermano pagano, Boleslao, después de haberle invitado a un banquete, lo asesinó con sus propias manos en una iglesia donde él se había retirado a orar previendo ya próxima su muerte. La pared de la iglesia donde fue martirizado aún conserva rastros de su sangre preciosa. El águila de su escudo es el símbolo histórico de la nación checa.

Como ha señalado Benedicto XVI, el ejemplo de Wenceslao sigue vivo en los siglos, y nos recuerda que la verdadera grandeza del hombre, es la santidad. Y no olvidemos que aquellos que querían seguir los objetivos puramente humanos y egoístas como su hermano Boleslao son un triste ejemplo para las posteridades. 
¡La única y verdadera felicidad se encuentra totalmente en la búsqueda de Dios!

PROPOSITO DEL DIA : 
¿Tengo la necesaria devoción al asistir a la Santa Misa? En la que asista hoy, procuraré poner mas atención.