Martes, 15 de enero: San Pablo (ermitaño)
El San Pablo que celebramos hoy nació en Egipto en el siglo II. Huérfano de padre y madre a la edad de 15 años, dejó el mundo y se retiró al desierto para orar a Dios más profundamente. Así perseveró hasta su muerte, tal vez el 15 de enero del año 347, a la edad de 113 años. A pesar de su alejamiento voluntario, sabemos algunos detalles de su vida gracias a la visita que realizaba de cuando en cuando, San Antonio del desierto poco antes de su muerte. San Antonio, de hecho, fue atormentado por una tentación de orgullo: ¿no eres tú el primero que ha dejado todo para seguir a Dios en el desierto? Para calmar esa tentación, Dios entonces, le envió a San Pablo, quien de hecho lo había precedido en este camino.
La liturgia, aunque generalmente discreta en ciertos detalles, otorga a San Pablo el glorioso título de "primer ermitaño". San Pablo, que advirtiendo su fin próximo pidió a San Antonio el favor de ser enterrado con el manto de San Atanasio. Él demostró que su vida de oración fue poderosamente util a quien tan valientemente había defendido la fe católica.
Admiremos a los ermitaños, estos esforzados atletas, aunque no todos seamos llamados a seguir su ejemplo. Es en sí misma, una vocación muy rara... ¿Pero entendemos lo que quieren decirnos? ¡Que la oración es el alimento de nuestra alma! ¿Vamos a hacer algo al respecto? ¡Qué oración mantenga viva a la Iglesia! ¿Estamos preparados para trabajar en ello? ¡Es la oración la que abre la puerta del cielo!
PROPOSITO DEL DIA :
Hacer un momento de silencio durante el día, para no olvidar que Dios tiene su mirada puesta en nosotros...
La liturgia, aunque generalmente discreta en ciertos detalles, otorga a San Pablo el glorioso título de "primer ermitaño". San Pablo, que advirtiendo su fin próximo pidió a San Antonio el favor de ser enterrado con el manto de San Atanasio. Él demostró que su vida de oración fue poderosamente util a quien tan valientemente había defendido la fe católica.
Admiremos a los ermitaños, estos esforzados atletas, aunque no todos seamos llamados a seguir su ejemplo. Es en sí misma, una vocación muy rara... ¿Pero entendemos lo que quieren decirnos? ¡Que la oración es el alimento de nuestra alma! ¿Vamos a hacer algo al respecto? ¡Qué oración mantenga viva a la Iglesia! ¿Estamos preparados para trabajar en ello? ¡Es la oración la que abre la puerta del cielo!
PROPOSITO DEL DIA :
Hacer un momento de silencio durante el día, para no olvidar que Dios tiene su mirada puesta en nosotros...
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