Jueves, 14 de febrero: San Valentín
No se sabe casi nada de San Valentín, fue sacerdote romano martirizado en el siglo III. Una basílica en su honor fue erigida en Roma a mediados del siglo IV y llegó a ser extremadamente famoso - y sigue siéndolo aún hoy - como patrono de los amantes, que sin duda necesitan de uno.
¿Osaré hablaros sobre el amor, yo que soy solo un sacerdote y que no sería quizás el mas indicado para hablaros de ello? por supuesto... Y bien ¡me atrevo! Y te preguntaré lo mismo que hago a las parejas que se preparan para el matrimonio: ¿Cómo podéis prometeros amaros toda una vida? Antes de responder, piénsalo una y otra vez: Visto que el amor va y viene, que tiene sus eclipses, sus cambios con la edad y sin dejar de mencionar el terrible día a día que hace la rutina... ¿es esta promesa honesta?
Lo es, si entendemos que hay dos tipos de amores en nosotros: el primero, más superficial y muy sensible, llamado el amor apasionado, que es bastante volátil por naturaleza. El otro es amor profundo, al que también se le llama compromiso fiel pase lo que pase y entrega total. Este es el que la Iglesia nos pide en el día de la boda. Este es del que habla Jesús cuando nos dice que no hay ningún amor mayor que el que da su vida por aquellos a quien ama... Es el que vivió San Valentín, pues prefirió ser mártir para permanecer fiel a Cristo. También nosotros podemos ser capaces de ello, si lo deseamos... Pero ¿lo deseamos de verdad?
PROPOSITO DEL DIA :
Orar por las familias
¿Osaré hablaros sobre el amor, yo que soy solo un sacerdote y que no sería quizás el mas indicado para hablaros de ello? por supuesto... Y bien ¡me atrevo! Y te preguntaré lo mismo que hago a las parejas que se preparan para el matrimonio: ¿Cómo podéis prometeros amaros toda una vida? Antes de responder, piénsalo una y otra vez: Visto que el amor va y viene, que tiene sus eclipses, sus cambios con la edad y sin dejar de mencionar el terrible día a día que hace la rutina... ¿es esta promesa honesta?
Lo es, si entendemos que hay dos tipos de amores en nosotros: el primero, más superficial y muy sensible, llamado el amor apasionado, que es bastante volátil por naturaleza. El otro es amor profundo, al que también se le llama compromiso fiel pase lo que pase y entrega total. Este es el que la Iglesia nos pide en el día de la boda. Este es del que habla Jesús cuando nos dice que no hay ningún amor mayor que el que da su vida por aquellos a quien ama... Es el que vivió San Valentín, pues prefirió ser mártir para permanecer fiel a Cristo. También nosotros podemos ser capaces de ello, si lo deseamos... Pero ¿lo deseamos de verdad?
PROPOSITO DEL DIA :
Orar por las familias
Comentarios
Publicar un comentario